En este blog he ido presentando
mis ideas acerca de la dinámica de formación para que el estudiante pueda gestionar
su aprendizaje. A partir de la consideración que el proceso formativo es el
mismo en cada situación, solo cambian las circunstancias del contexto donde se
desarrolla, en esta entrada en específico lo situaré en la educación a
distancia.
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| Estudio independiente* |
En concreto, los fundamentos
teóricos que le sirven de sustento son los relacionados con la formación, la enseñanza
aprendizaje, la autonomía, la autogestión del aprendizaje, las estrategias
didácticas, la educación a distancia, los materiales instruccionales, la
investigación como metodología de formación y la transversalidad.
¿Qué fundamenta la autogestión del aprendizaje en la formación a distancia, desde los materiales autoinstruccionales?
En una breve exposición a partir de tres ámbitos esenciales, puntualizaré
sobre esta fundamentación teórica[i]
que soporta la necesidad y posibilidad de alcanzar esa autogestión. La
caracterización de la dinámica de formación y la educación a distancia están en estas dos entradas.
Educación a distancia (EaD).
Está diseñada para la educación en gran escala al mismo tiempo que
para el aprendizaje individual, debiendo favorecer el estudio independiente, por cuanto
cada estudiante desde su ámbito debe interactuar con el asesor y los contenidos
programáticos presentados a través de los diferentes medios y recursos de los
cuales dispone.
Específicamente el material debe
ser de tipo autoinstruccional, organizado y estructurado por técnicas con
combinaciones (aún) conductistas y (cada vez mayor) cognoscitivas, de tal forma
que cualquier estudiante se motive y avance en su aprendizaje sin necesidad de
otro apoyo, pero al mismo tiempo, con la posibilidad de desarrollar su
potencial cognitivo y metacognitivo para que su dependencia vaya gradualmente
haciéndose menor en la medida que aumente su autonomía. Incluir el diálogo
didáctico guiado permite llevar una secuencia metodológica y conversacional en
el material escrito, como base de la mediación del asesor para el aprendizaje
del estudiante.
Proceso formativo.
Uno de los objetivos de a EaD debe
ser propiciar la autogestión del aprendizaje en el estudiante, capacidad que incide positivamente
en la autonomía y por consiguiente, el tomar el control de su formación,
proceso que desarrolla al individuo como persona y como profesional; para lo
cual desde la institución se insta intencionalmente al desarrollo de
condiciones que reafirmen esa autogestión efectivamente para facilitar que este
individuo pueda optar por una formación permanente, al haber adquirido
conocimientos y estrategias que connoten auto-motivación, auto-orientación y la
auto-regulación.
Por consiguiente, la formación a
distancia debe dirigirse a lograr que el sujeto esté en constante diálogo con
su realidad, gestionando su conocimiento desde la apropiación y recreación de
su cultura a través del aprendizaje,
como resultado de la reconstrucción de su estructura cognitiva, del pensamiento
y del lenguaje, a partir del conflicto cognoscitivo que ocurre en el sujeto por
la interacción entre lo nuevo y los conocimientos y experiencias previas; por
lo que deben preverse estrategias y actividades significativas y variadas, en
los materiales autoinstruccionales, desde el nivel real para avanzar
progresivamente al nivel potencial del individuo, en la medida que interactúa
con sí mismo, con sus semejantes y el contexto.
Este espacio de interacción para la construcción de conocimientos es la dinámica de la enseñanza aprendizaje como proceso base de la formación. Las
estrategias fundamentales para este sistema a distancia son las que sirven de ayuda
para orientar, facilitar y potenciar el aprendizaje mediante los materiales
autoinstruccionales, a saber: motivacionales,
cognitivas y metacognitivas.
Investigación formativa.
La investigación en la enseñanza
aprendizaje promueve la habilidad de indagar y observar reflexivamente, el
pensamiento lógico y sistemático, entre otras, mediante la apropiación y
construcción de la cultura, para que los estudiantes aprendan a aprender, a
conocer, a ser, a hacer y por consiguiente a convivir.
La investigación es
consustancial al aprendizaje en
la construcción del conocimiento; como eje articulador de todo este proceso a
distancia, conlleva necesariamente al desarrollo de ciertas herramientas, habilidades
o capacidades básicas que permitan al estudiante problematizar, teorizar e
instrumentar los conocimientos.
Son herramientas y habilidades
del pensamiento, el lenguaje y la investigación, integradas en un proceso de investigación formativa que debe ser transversal en el programa educativo,
desde la metodología que se aplique en cada una de las asignaturas.
[i] Salazar-Coraspe, J.
(2014). Orientaciones para el Diseño de los Materiales Didácticos. Metodología
para la autogestión del aprendizaje. Editorial Académica Española, España.
*Imagen de Free-Photos en Pixabay
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