Tradicionalmente,
la enseñanza del tema ambiental se ha dado como contenido de asignaturas en un programa
educativo. Cada vez más son las voces que indican que debe ser un contenido
transversal de todo el programa, aunque prevalece la primera orientación. ¿Qué
es lo más adecuado? ¿Podemos decir que uno es más adecuado que el otro?.
Somos parte de una comunidad que comparte espacio, conocimientos, valores y actitudes definitorias propias. Como parte de ese todo estamos en continua interacción con el medio ambiente y en esta medida, sus consecuencias pueden ser para bien o para mal, en diferentes grados.
Somos parte de una comunidad que comparte espacio, conocimientos, valores y actitudes definitorias propias. Como parte de ese todo estamos en continua interacción con el medio ambiente y en esta medida, sus consecuencias pueden ser para bien o para mal, en diferentes grados.
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| El individuo en su medioambiente* |
Ello nos obliga a reflexionar para actuar responsablemente bajo una nueva conciencia solidaria y esa orientación debe guiar los programas educativos.
Si
el ambiente es un concepto integral ¿por qué su enseñanza debe estar
compartimentada? Y si dentro de esta enseñanza son muy importante los valores y
actitudes ¿cómo vamos a centrarla en determinados contenidos de un programa
educativo?
La visión de sentirnos integrantes e integrados debe prevalecer en un enfoque educativo porque el desarrollo humano va de la mano del desarrollo ambiental. Por ello es muy importante que conozcamos más sobre la materia medioambiental, su identidad, esencia y comportamiento, y no menos baladí, nuestro papel fundamental en todo ese desarrollo.
En
este caso, existen áreas del conocimiento específicas que tratan contenidos
relacionados y son su objeto de estudio; que no pueden ser descartadas. También
existen asignaturas que incluyen en sus temarios ciertos contenidos ambientales
que bien pudieran enseñarse en colaboración de sus docentes, dado que
permitiría una visión globalizadora e interdisciplinaria de lo ambiental.
Con
una estrategia que articule diversos contenidos y actividades, en una secuencia
que favorezca el aprendizaje de forma coherente e integrada, tendría más
sentido la educación ambiental para el estudiante. Recordemos que, aprendemos
mejor cuando lo que hacemos lo sentimos significativo, relevante y conectado
con nuestro contexto.
Así,
la educación ambiental debe considerarse fundamentalmente como un eje o tema transversal
en el currículo, que responda a una planificación integrada de las diferentes asignaturas,
desde las especificas hasta las generales; que más allá de solo conocer los temas
nos guíen hacia la construcción de alternativas para un mundo con mejor calidad
de vida, con énfasis en la solidaridad y responsabilidad ante esa gran tarea.
Debemos
aprender sobre el medioambiente, pero también debemos aprender a saber actuar
positivamente sobre ese medioambiente con respeto, solidaridad, tolerancia y
autonomía, entre otros, en un trabajo reflexivo, colaborativo y cooperador con
nuestros congéneres.
Para
ello, la educación ambiental debe centrarse en el logro de aquellos
conocimientos, habilidades, valores y actitudes que nos permita comprender
mejor la complejidad del medioambiente y la presencia en éste del ser humano
como actor y autor al mismo tiempo. Buscando siempre la creación de esa
conciencia ciudadana, que nos lleve a relacionarnos bajo una nueva forma de
participación responsable y por consiguiente, a un modo de vida distinto.
¿Cómo llevar adelante la educación ambiental?
En
primer lugar, la transversalidad debe imbricar todo el programa y adecuarse a
cada nivel educativo, en atención a los aprendices, su entorno y al tratamiento
de la realidad estudiada con un enfoque integrador e interdisciplinario.
Incluyendo la posibilidad del estudiante de exponer sus propias ideas a través
de distintas actividades y alternativas.
Segundo,
la estrategia didáctica seguida debe brindar una secuencia de actividades para estudiar
el medioambiente, identificar y formular una problemática, desde la comprensión
de sus circunstancias, causas y consecuencias, con la finalidad de buscar y
encontrar las mejores soluciones posibles, así como comprender sus resoluciones,
mediante valoraciones del proceso y sus resultados.
Hay
muchas experiencias y buenas prácticas que se pueden consultar
como referencias cuando se quiere llevar adelante la aplicabilidad de la
educación ambiental en los distintos niveles educativos. Por
ejemplo, ubiquémonos en un programa específico, educación primaria en México[i], dirigido a la
formación integral, basado en competencias y administrado mediante aprendizajes
clave que se organizan en tres componentes curriculares articulados: Campos de
Formación Académica, Áreas de desarrollo Personal y Social, Ámbitos de
Autonomía Curricular (figura en pág. 113).
Allí
identifican los requisitos de egreso de los estudiantes basados en: Lenguaje y
comunicación. Pensamiento matemático. Exploración y comprensión del mundo
natural y social. Pensamiento crítico y solución de problemas. Habilidades
socioemocionales y proyecto de vida. Colaboración y trabajo en equipo.
Convivencia y ciudadanía. Apreciación y expresión artísticas. Atención al
cuerpo y la salud. Cuidado del medioambiente. Habilidades digitales.
La
Exploración y comprensión del mundo natural y social es un campo de Formación
Académica “constituido por los enfoques de diversas disciplinas de las ciencias
sociales, la biología, la física y la química, así como por aspectos sociales,
políticos, económicos, culturales y éticos”. Cuyo objetivo central es que los
estudiantes puedan adquirir una base conceptual, procedimental y de valores y
actitudes para que puedan explicar el mundo donde viven y analizar problemas diversos.
Una
de las asignaturas es el Conocimiento del Medio (para preescolar, 1º y 2º de
primaria); en ella exploran la naturaleza para que los estudiantes obtengan una
imagen más integral de su entorno. Siguiendo con el ejemplo, tomamos el elemento agua para su estudio,
articulando con el Cuidado del medioambiente, podemos plantear una secuencia de
actividades. A saber:
- Identificar la presencia del agua en su entorno inmediato o conocido (en forma natural o tratada por el sujeto, dependiendo de la que vayan a estudiar) y descripción de su experiencia.
- Observar el aspecto del agua y su entorno, preferiblemente en forma directa en una excursión, o mediante imágenes y vídeos de escenas favorables y contaminadas; con la idea de, por una parte, identificar lo que conoce y por la otra, diferenciar ambas situaciones.
- Facilitar el intercambio de ideas con los compañeros, conversar sobre lo percibido en general, la discusión de los diferentes problemas observados, por qué suceden y los posibles efectos para los humanos, los animales y las plantas.
- Propiciar la conformación de grupos que estudien un poco más cada problema con el fin de plantear soluciones y propuestas de intervención, que al final serán socializadas entre ellos (atendiendo al nivel y edad de los niños).
- Desarrollar la información con la bibliografía y consultando a otras personas, dándoles libertad para la recolección de datos. ¿Qué opinan sobre el tema? ¿Qué opinan los otros miembros de la escuela, familia y amigos? ¿Qué pueden hacer al respecto?
- Presentar las propuestas de intervención en un ejercicio libre. En la actualidad no dudemos de las ideas que nos pueden aportar nuestros estudiantes cuando están implicados en la tarea.
- Comunicar los resultados a través de una exposición de dibujos u otras alegorías realizadas o mediante un periódico o similar.
Es
una estrategia que bien llevada favorece una actitud de indagatoria e implicación y posibilita, en paralelo y como parte del
proceso, estudiar contenidos de las otras asignaturas, como el reconocimiento
de otros seres vivos, materiales y figuras geométricas; leer y escribir;
trabajar con modelos u otras representaciones; registrar las observaciones y
mediciones; organizar, analizar e interpretar datos y textos. La evaluación
está implícita en el mismo desarrollo de las actividades.
[i]https://www.planyprogramasdestudio.sep.gob.mx/descargables/biblioteca/primaria/1grado/1LpM-Primaria1grado_Digital.pdf
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