Pareciera
un nuevo paradigma, tal como están tratando en diferentes círculos el aporte de
la neurociencia a la educación, quizás no lo es, quizás lo que ha cambiado es el
enfoque. Siempre hemos conocido el valor del cerebro para nuestra existencia y
su papel en el aprendizaje.
Lo
bueno es que toda esa información está digerida para que la entendamos todos y podamos
aplicarla en las aulas y, entendamos también, el porqué de los cambios
suscitados en la pedagogía y el proceso enseñanza aprendizaje.
Veamos
el aporte de Jesús C. Guillén en su libro:
Neuroeducación en el aula: de la teoría a la práctica.
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